Arte y Salero nace de la mano de Crescencio Gámez, que cómo resultado de su experiencia en la cocina suiza durante más de 8 años y de su gestión en múltiples restaurantes de Córdoba (Boccalino y Rigoletto entre otros), decidió poner a disposición de sus clientes su cocina más personal e íntima.
Actualmente se dedica a la enseñanza en la escuela de turismo e interior de Lucena, y también es profesor de una milenaria técnica conocida como la talla de frutas, de origen oriental.
